El merchandising es una técnica visual que roza el arte efímero con un propósito muy claro, VENDER más y mejor. Dirigir la venta mediante una experiencia de compra gratificante donde el cliente es el punto de partida y todas las acciones giran en torno a él. Con el merchandising pretendemos enamorar al cliente, bajar la guardia de sus resistencias y transportarle a un mundo donde todo le resulte fascinante, un mundo hechizante de productos que enloquezcan sus instintos primitivos para que compre, compre y vuelva a comprar.
Las tres claves principales en las técnicas del merchandising son:
- Adecuar el entorno del espacio comercial
- Presentación del producto
- Rotación del producto
- Beneficio del producto
Ya os he hablado de adecuar los entornos comerciales con el marketing sensorial por lo que hoy nos centraremos en el resto de puntos. En la presentación del producto es importante conocer los tipos de compra que los consumidores realizan (compra premeditada, sugerida, compra impulsiva, impulsiva y planificada, recordada…) para crear con éxito un «mapa de producto» donde planifiquemos qué vamos a colocar en cada mesa, góndola, árboles, paneles, frontales o lineales.

En el merchandising es importante conocer muy bien la colección del producto que disponemos y realizar distintos ambientes coherentes tanto por uso como por estética y colorido, diseccionar la colección por familias o mini-colecciones que proporcionen una idea clara y sencilla a nuestros clientes. Esas mini-colecciones deben interactuar entre ellas, así que debemos distribuirlas por todo el espacio con un sentido comercial que facilite al cliente entender qué puede conseguir y qué opciones tiene de compra. En esta parte de marketing sensorial visual el objetivo es enamorar al cliente mediante su sentido de la vista.
Con la rotación del producto periódica conseguimos una imagen de punto de venta fresco, dinámico, divertido y versatil. También es importante crear distintas estructuras con los elementos del mobiliario donde nuestros clientes más fieles encuentren en cada visita un nuevo recorrido por el cual descubran de formas diferentes nuestros productos; la sorpresa es una emoción que ayuda a fidelizar y mantener el interés por nuestra marca, acción primordial para que las ventas aumenten. Para que la acción de rotar se efectúe correctamente, el diseño de la tienda debe contemplar y tener muy presente este recurso, eligiendo muebles donde sea fácil cambiar la estructura y adecuarlos a distintos tipos de producto.

El beneficio del producto es el uso positivo que un cliente puede hacer de un producto, ayudando a que realice un deseo personal y con el merchandising podemos ofrecer una imagen que sugestione al comprador para que recuerde sus deseos y poder incitar a la compra. Las zonas de exposiciones son un lugar perfecto para realizar esta acción de marketing visual donde la combinación de diferentes productos es capaz de convertirse en una idea clara que sugestione la pasión de nuestros clientes y realicen su sueño al adquirir estos productos.
El merchandising conlleva acciones complejas y un proceso de labores que si se trabajan adecuadamente obtienen muchos beneficios para cualquier empresa (aumento de imagen de marca, optimización de los productos, conseguir objetivos comerciales en ventas…). En Studio Escaparatismo somos especialistas en técnicas de Visual merchandising y desarrollamos proyectos con un alto grado de éxito para vender más y mejor, ¿nos dejas ayudarte?
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